Brillante, blanco, elegante y potente, el Royal Oak Concept
GMT Tourbillon que se presentará por primera vez en el Salón Internacional de
Alta Relojería 2014 (SIHH) en Ginebra, es un reloj para los coleccionistas y
expertos más vanguardistas que no admiten peros ni en términos técnicos ni
estéticos.
Su caja esculpida en titanio y la correa de caucho integrada
se combinan con un bisel de cerámica blanca que enmarca el arquitectónico
conjunto de la jaula del tourbillon y la esfera de zona horaria ‘GMT’. Caja y
movimiento en perfecta armonía. Esta novedad para 2014, otorga el protagonismo
a un puente superior intrincadamente mecanizado, fabricado en cerámica blanca,
algo que solo es posible en la actualidad gracias a los avances continuos en el
campo de la ciencia de materiales.
LA EVOLUCIÓN DEL CONCEPT
El Royal Oak Concept fue presentado por primera vez en 2002
como un tributo vanguardista para celebrar el 30 aniversario del legendario
reloj octogonal Royal Oak de Audemars Piguet diseñado por Gérald Genta como el
primer reloj de lujo del mundo fabricado en acero inoxidable.
La caja de alacrita 602 ultra dura del Concept se redondeó
para destacar el característico bisel octogonal de Genta y sus ocho tornillos
hexagonales. La esfera se dejó al desnudo, dejando a la vista la micro mecánica
que le da vida. Todos estos símbolos de un diseño revolucionario se han
mantenido en la serie Concept, desde el Royal Oak Carbon Concept Tourbillon y
Cronógrafo, una pieza ultra delgada que fue el primer reloj en combinar una
caja y platina principal de carbono forjado – hasta el Royal Oak Concept GMT
Tourbillon de 2011, con una caja de titanio ultra ligera y ultra resistente,
con bisel octogonal, pulsadores y corona de cerámica negra.
El Royal Oak Concept GMT Tourbillon de este año cuenta con
un bisel, corona y pulsadores de cerámica blanca, en lugar de negra, lo que
aporta un mayor contraste con la caja de titanio. No obstante, en su habitual
línea innovadora, la Manufactura ha ido un paso más allá y ha incorporado la
cerámica al propio movimiento, sustituyendo el puente superior negro del
calibre 2913 por cerámica blanca. Como resultado, el nuevo del calibre 2930 se
ha transformado visualmente, su resplandeciente puente en forma de reloj de
arena recibe una mayor vivacidad gracias a la doble simetría de los puentes del
tourbillon y la esfera GMT.
La cerámica blanca es unas nueve veces más dura que el
acero, lo que supone que la fabricación del bisel, los pulsadores, la corona y especialmente
el puente superior de intrincadas formas del Royal Oak Concept GMT Tourbillon
ha sido un proceso complejo y largo.
La cerámica es un material compuesto prácticamente imposible
de rayar, de hecho solo es posible mediante máquinas de corte especial
equipadas con herramientas con punta de diamante. Tratar las superficies y los
bordes mecanizados con un acabado pulido o satinado representa un enorme
desafío técnico, debido a la resistencia inherente a la abrasión de la
cerámica. Se tardan 8 horas en hacer el bisel del Royal Oak Concept GMT
Tourbillon, en comparación a los 45 minutos que se tardaba en trabajarlo en
acero, por lo que se requiere todo el « savoir-faire » hacer de los relojeros y
los ingenieros. Además de aportar una apariencia final excepcionalmente suave,
la cerámica tiene una finalidad práctica: su extrema resistencia al desgaste.
De forma similar, el titanio utilizado para la caja y el
cristal de zafiro son ultra resistentes, cómodo de llevar y tan ligero como el
acero, toda una ventaja para un reloj con unas generosas dimensiones,
concretamente de 44 mm. Otro de los ejemplo del profundo conocimiento sobre
metales y materiales de alta tecnología que posee Audemars Piguet es el relace
interior que rodea la esfera, que está fabricado de aluminio ligero, endurecido
mediante anodización.
Este atrevido cóctel de cerámica y metales es, de momento,
el último capítulo de la búsqueda continua de Audemars Piguet por avanzar hacia
lo desconocido en lo que se refiere a ciencia de materiales, un camino que
comenzó hace más de 40 años con el giro más osado de la Manufactura: utilizar
por primera vez acero para la fabricación de un reloj de lujo.
UN GIRO DE TUERCA
La característica que define los relojes Concept de Audemars
Piguet siempre ha sido la coherencia entre caja y movimiento. El ultra moderno
'motor' se integra a la perfección con el ultra moderno 'chasis', cuya estética
'techy' se complementa a la perfección con la micro mecánica que deja a la
vista.
Un detalle impresionante en sí mismo, el calibre 2930 de
cuerda manual del Royal Oak Concept GMT Tourbillon cuenta con un doble
barrilete que garantiza una autonomía de 10 días, tourbillon y esfera con huso
horario ‘GMT’.
Su funcionamiento lo regula un escape de 3 Hz (21.600 vph),
que gira dentro de la jaula del tourbillon cada 60 segundos, compensando el
efecto de la gravedad que ejerce la Tierra cuando el reloj está orientado
verticalmente durante mucho tiempo.
La caja del tourbillon está compuesta por 85 elementos,
aunque solo pese 0,45 g. Un experimentado relojero dedica casi tres días a
montar sus 85 componentes, incluyendo dos días completos para instalar la
jaula, mientras que la tarea en su conjunto requerirá más de dos semanas de
trabajo. Audemars Piguet sigue siendo una de las pocas Manufacturas en haber
dominado todas las complejidades de esta complicación, con más de 25
movimientos diferentes que integran un tourbillon. Cada componente se bisela, pule,
monta y equilibra a mano.
La esfera GMT ofrece una lectura inmediata de la hora en un
segundo huso horario. Se ajusta mediante el pulsador que se encuentra a las 4
(cada pulsación adelanta una hora). El segundo huso horario, que se basa en 12
horas, está formado por dos discos superpuestos, lo que facilita la
visualización de la hora. El primero, sobre el que se muestran las horas,
completa un giro cada 12 horas. El segundo, situado justo debajo, completa un
giro en 24 horas y tiene dos zonas de color: una mitad blanca para el día y
otra negra para la noche. Esto facilita la lectura de los números.
El exclusivo sistema de doble barrilete paralelo de Audemars
Piguet garantiza que el Royal Oak Concept GMT Tourbillon funcione durante 10
días sin que haya que volver a darle cuerda manualmente; el sistema genera una
fuerza constante durante cerca de 237 horas de autonomía, mejorando así la
precisión de funcionamiento.
La energía de los dos barriletes del calibre 2930 de 10 días
se transmite al mecanismo al mismo tiempo a través de un único engranaje que
une los dos barriletes. Se trata de una forma mucho más suave de transmitir la
energía que el sistema habitual de dos barriletes de 5 días unidos en serie.
También reduce la presión sobre la maquinaria, la fricción en los barriletes se
utiliza para compensar las variaciones de par, y ofrece una mayor precisión,
reserva de energía y fiabilidad.
El Royal Oak Concept GMT Tourbillon también incluye un
mecanismo indicador de modo. Según la posición de la tija, la manecilla situada
en el dial a las 6 indica la función seleccionada. Las letras H, N y R
corresponden a las tres posiciones de la tija: puesta en hora, neutral y
cuerda, respectivamente.
Fuente: Audemars Piquet