El cronógrafo Grand Prix de Monaco Historique es un reloj de carreras, tanto en sentido literal como metafórico. Tiene el espíritu, las funciones y los colores. Con su renovado diseño y su caja de titanio mate, su nuevo código de color amarillo y su correa “racer” inspirada en las carreras, rinde homenaje a la Fórmula 1 clásica. Potente y fiable, técnico y cómodo, está concebido totalmente como un instrumento de pilotaje.
Por séptima vez consecutiva, Chopard es la marca patrocinadora y cronometradora oficial del Gran Premio de Mónaco Histórico. El fin de semana de los días 10 y 11 de mayo de 2014, la ciudad de Mónaco vibrará al son de los antiguos Fórmula 1 Lotus, Cooper o Lola, además de los Ferrari, los Bugatti y otras glorias de antaño. Tradicionalmente, Chopard presenta un cronógrafo como homenaje a cada edición de esta carrera que tiene lugar cada dos años. Por primera vez, la casa ginebrina ha decidido desarrollar una nueva colección completa « Grand Prix de Monaco Historique”, en la que el cronógrafo, como pieza central de la colección, es el primer modelo que va a ser presentado.
Nueva estética
La caja adopta una nueva ergonomía, con unas asas más nervadas, más tensas. Su diámetro se ha ampliado hasta los 44,5 mm. La esfera ha sido completamente rediseñada e incorpora rayas, como los pianos de las salidas de las curvas. El aro de los índices es de una sola pieza, como un disco de frenos. Está surcada por índices en forma de flechas dotadas de luminova, que forman parte de los nuevos principios Classic Racing de Chopard.
El elemento más visible es seguramente el haber recurrido a un nuevo código de color, el amarillo vivo. Recuerda a la concentración del piloto lanzado a más de 250 km/h a la salida del túnel de Mónaco. En efecto, la carrera clásica es un ejercicio viril, peligroso y lleno de emoción. Los Fórmula 1 de los años 30 a 70 son cada uno de ellos a su manera, unos monstruos de la potencia que carecen de sistema antiderrapante, ni de dirección asistida. Sus frenos y suspensiones son, literalmente, de otra época. Cuando se está dentro de un habitáculo de chapa de aluminio que vibra al unísono de un V8 en línea Brabham, montado sobre unas suspensiones completamente rígidas, hay que poder mirar al reloj con la misma facilidad que si se estuviera parado en los boxes.
Ligereza y solidez a toda prueba
La tecnología tiene la misión de adaptarse a las necesidades del piloto. Esto es tan importante para la máquina que está conduciendo, como para la que lleva en la muñeca. El requisito de Chopard es que sus relojes sean irreprochablemente funcionales, pero que además posean una estética potente y única. Esta interdependencia entre forma y función, entre apariencia y esencia (la gasolina con plomo, por favor) lo que caracteriza al modelo Grand Prix de Monaco Historique Chrono 2014.
La función antideslizante de los botones del cronógrafo de titanio se debe al gran tamaño de su superficie grabada, inspirada en la de un pistón. La legibilidad del reloj se ve reforzada por el juego de contrastes de la esfera, que toma forma por medio del color amarillo de las agujas en la parte del cronógrafo, y el negro con luminova para las agujas de las horas, los minutos y los segundos. Todas ellas destacan sobre el fondo, ya sea plateado o negro. La necesidad de ligereza y de solidez es vital para el automóvil, su manejabilidad y el aprovechamiento de toda su potencia.
El Chronographe Grand Prix de Monaco Historique se adapta por medio de la incorporación de una caja de titanio micro pulido. Bisel y fondo están realizados en acero pulido. Este último está grabado con el logo del Automobile Club de Monaco, el organizador del Gran Premio.
El encaje del piloto en su habitáculo condiciona su seguridad y su comodidad. En lugar de un arnés de seguridad de 4 puntos, el reloj posee una hebilla desplegable de titanio. Esta hebilla cierra una correa de becerro negro con grandes orificios y con pespuntes amarillos, a la manera de los “racing” de los años 60. Como opción, se ofrece una correa de nylon trenzado de tipo NATO, negra con bandas amarillas, que recuerda a los capós del Ford GT40 o el Shelby Cobra Daytona. La firmeza de las puertas es también una condición importante para la seguridad del piloto. La corona de titanio está atornillada y protegida por el respaldo de unos hombros micro pulidos.
Ffinalmente, la fiabilidad del motor es lo que va a suponer toda la diferencia en el momento de la clasificación. El mejor piloto al volante de la mejor máquina no consigue nada si sufre una avería antes de la meta. Chopard utiliza un movimiento de cronógrafo automático probado y de acreditada resistencia. La precisión de su marcha está probada y garantizada por el Control Oficial Suizo de Cronometría, el famoso COSC.
El cronógrafo Grand Prix de Monaco Historique es un reloj de carreras, tanto en el sentido literal como en el metafórico. Tiene el espíritu, las funciones y los colores. No se trata de nostalgia ni de un modelo antiguo adaptado al gusto de hoy en día, sino que, más bien se trata de una creación puramente contemporánea. Salpicado de alusiones y de referencias a los códigos de los F1 de leyenda, está siempre dispuesto a ponerse al volante.
Publicado
http://www.wthejournal.com/es/en-direct/article/chopard-grand-prix-de-monaco-historique-chrono
